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Aunque no soy muy enamorado de los analógicos, y mucho menos de los relojes tácticos, a la marca germana KHS le tengo un cariño especial, lo reconozco. Y su último lanzamiento me ha gustado bastante. Quizá porque son de los pocos que mantienen en su catálogo digitales como sus Silencer, con iconos de visualización del estado (activado/desactivado) del temporizador y cronógrafo desde la pantalla de inicio, una característica que siempre he echado a faltar en relojes como los Casio.
Pero en este caso voy a hablar de su modelo KHS Reaper ("segador", una referencia a la muerte, en KHS tienen todos nombres así de "sugerentes"), un reloj que aún no está a la venta (lo hará a partir del 23 de septiembre), y que incluye el sistema de iluminación H3, un sistema que ofrece diferente color para cada zona del reloj. En este caso los índices se iluminan en un llamativo rojo, mientras que el índice correspondiente a las doce en punto -para servir de referencia- se ilumina en blanco (incluyendo las agujas, con recubrimiento de radioisótopos del que hablaré más adelante).
El Reaper está muy bien construido, su cristal es mineral, endurecido, resiste el agua hasta los 100 metros de profundidad, y tiene bisel giratorio. Pero lo más interesante es que su caja, realizada en resina, ha sido reforzada utilizando fibra de carbono (con la tecnología CRFP -polímero reforzado con fibra de carbono-, tecnología que se utiliza también en determinadas partes de carrocería -o piezas- de coches superdeportivos, y también en aviación). Un bonito detalle es que la información sobre el uso de ese material para la caja se encuentra en la parte posterior del reloj, lo que seguramente despierte la curiosidad de cualquiera que se lo enseñes, y más cuando le expliques que posees un reloj realizado con composite y fibra de carbono, como si de un Lamborghini se tratase.
Del KHS Reaper se pueden elegir hasta 17 tipos distintos de correas (desde la web del fabricante se pueden adquirir sueltas), y tiene un llamativo segundero en rojo para -según KHS- podamos establecer fácilmente una cuenta atrás. El reloj, que ofrece también ventana dataria a las tres, cuesta 159 €, lo que, como ves y teniendo en cuenta los materiales que han utilizado es un precio muy atractivo. Y si a esto añades a quien "le presentes el reloj" que parte de su iluminación la efectúa recurriendo al tritio (isótopo radiactivo del hidrógeno) los puedes dejar espantados. Eso sí, solo tiene 1 GBq ("1 giga becquerel", o sea 27 millicuries), porque como sabrás incluir una cantidad superior es ilegal.
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| Redacción: Radio Ibérica
No es el tipo de reloj que me gusta, pero admito que con un cuarzo suizo en el interior (Ronda), y el tritio, tiene un buen precio.
ResponderEliminarLo de la caja reforzada, tendría que verlo por dentro, en lo que a mi respecta, es de momento resina.