Ya os he contado el problema que tenía la casa de un familiar con las lámparas de bajo consumo. Una idea para solucionarlo (bueno, mejor dicho para salir del paso) es usar lámparas de escritorio (o de pie). No obstante y con ésto había otro inconveniente, y es la escasa durabilidad que, por lo general, tienen. Hasta ahora por unos diez euros había estado salvando los muebles con esas lámparas que se pueden encontrar "en los chinos", que tienen buena pinta y poseen el exterior de metal, pero que en cuanto a calidad dejan mucho que desear.
Por de pronto, y eso le ha ocurrido ya varias veces, con impactos o caídas la bombilla se funde de inmediato. Otro problema añadido es que calientan bastante y "desprenden olor" (sí, y no tiene nada que ver con los watios, debe ser más bien cuestión de los materiales de construcción), y encima sus interruptores no aguantan demasiado. De encender y apagar se les borran las marcas y no es eso todo lo malo, sino que se estropean y a veces tienes que presionar con fuerza para prenderla.
Por si todos esos inconvenientes fueran pocos, encima la lámpara pesa muy poco, por lo que con pequeños roces (algo lógico en una señora mayor de temblorosas manos) normalmente se cae, amenazando con que el fino cristal de su bombilla se quiebre y se pueda producir una herida.
De modo que hace unos días mi hermana me habló de esta lámpara que tiene una presencia y, al menos se le presupone, una calidad mayor.
El precio es casi el doble que el de las lámparas "de los chinos" (esta también está fabricada en China, por cierto), pero se nota que ya es una lámpara más seria. Su peso es ya digno, y tiene una base muy sólida y segura que, además, incluye cuatro puntos de apoyo de goma. Todo eso evita ya de por sí que la lámpara se mueva con toques accidentales. El sistema de alojamiento del casquillo de la bombilla está mejor protegido, y el flexo se mueve y maneja muy bien. Además, y al contrario de "las chinas", no tiene flexo en todo el brazo, sino solamente en su parte más elevada, lo que permite enfocarla al lugar que queramos con mayor comodidad y acierto.
El embalaje tampoco tiene nada que ver con la caja de "cartón cutre" de las lámparas de los chinos, y queda evidente que es un producto con una cierta entidad y de marca.
Se puede encontrar en varios colores (blanco, amarillo, azul...) e incluye en la caja de venta una bombilla de bajo consumo de 11 W y 600 lúmenes (con una durabilidad de 10.000 o diez años, dice...). Una bombilla que alumbra, por cierto, en ese tenue color -que me encanta- entre el blanco y el naranja. Por cierto que estas bombillas de bajo consumo ya están fabricadas en China, en lugar de las antiguas bombillas de Philips de fabricación española.
La única duda que me surge es el interruptor, no lo veo tan distinto a las lámparas baratas, y de hecho las indicaciones de encendido y apagado vienen también pintadas (y no marcadas), así que no se si se borrarán también con el tiempo o no.
Aunque el interruptor parezca el mismo a primera vista, supongo -y eso espero- que su construcción interna será radicalmente diferente, más robusta y fiable que en las de los chinos. Espero que sí, aunque eso solo lo dirá el tiempo. Por de pronto es esa su único punto flojo, ya que el interruptor no me inspira demasiada confianza. Ojalá me equivoque y esta lámpara esté acorde y a la altura con la marca que luce y con su fabricante.
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| Redacción: Bianamaran
Eso que dices del olor, yo lo aprecié con una regleta de los chinos. Y me dio que pensar, porque el olor, viene causado por algo. Puede que se desprendan sustancias que sean tóxicas, puede que cortocirtuite, o sin ser tan extremos, son una prueba de que la baja calidad del material hace que degenere.
ResponderEliminarDesde entonces hago como tu con tu lámpara. Estoy dispuesto a pagar el doble por algo de calidad, preferiblemente que no sea Made in China, aunque como explicas, no todo lo hecho allí es malo. Pero al menos que tenga cierto control, y soporte detrás.
Incluso si el precio es muy bajo, menos de 5 euros, no me importa a veces subir hasta el triple. Porque seamos francos. Esa lámpara que cuesta casi del doble que una de un chino, te va a duran mucho más del doble de tiempo. Dinero amortizado, una compra más sostenible, y tiempo ganado. No tendrás que volver a ir de aquí a dos meses a comprar otra. Con el desplazamiento y molestias que ello cause.
En efecto, supongo que al ser Philips vigilarán la calidad, o se presupone que así sea. Lo del olor es raro, será plástico o algún pegamento que echan, la verdad que no lo sé.
ResponderEliminarahora que lo miro tengo que quitar eso del logo de "defendiendo un mundo mejor", parece que es un blog escrito por Superman :D
A mi me gusta esa consigna. A nuestro modo, intentamos definir unas opiniones, y una moralidad, que pensamos haría de las personas y del mundo un sitio un poco mejor. Es lo que es. Aunque de buenas intenciones...
ResponderEliminarEspero que aunque cuando llegue el momento, hayas abierto y cerrado 5 o 10 blogs, porque sea de aquí a mucho, nos expliques como va con la lámpara. Tengo verdadera curiosidad por ver en cuánto supera a la vida media de las del chino que explicas.
¿Por cierto, cuanto duraron?
jajaja! 5 o 10 blogs :D
EliminarNo quiero quedarme escaso pero si llegó al año creo que no me quedaría corto, Guti