14.9.17

Nuevos relojes Cuervo y Sobrinos para celebrar su 135 aniversario


Cuervo y Sobrinos nace en La Habana en 1882, de manera que en este 2017 están celebrando su 135 aniversario. La historia de esta curiosa firma (con raíces hispanas, pero ahora de fabricación suiza) empieza en el pequeño taller de Don Ramón Cuervo, apodado "La Casa", situado en la Quinta Avenida de la capital cubana. Armando Rio Cuervo y sus hermanos trabajan a conciencia para expandir el negocio de relojería y de joyería fundado por su tío Ramón, y acuñando así el nombre de Cuervo y Sobrinos (el tío Ramón, y Armando y sus hermanos).

No tardan en entender que la estrategia de ventas, si quieren afianzarse como marca a nivel internacional, pasa necesariamente -en aquellos años de principios del siglo XX- por establecerse también en Europa. Así, abren filiales en Pforzheim (Alemania) y en la Rue Mezlay de París. Además, se lanzan a la aventura de llegar al corazón de la relojería mecánica mundial, Suiza, abriendo sede en La Chaux-de-Fonds.




Los caóticos tiempos de los últimos años de los cincuenta afectan enormemente a la familia relojera, y parte de la familia Cuervo tiene que escapar de la Habana, y se van al exilio en Europa. A partir de ahí, la firma desaparece como tal, aunque sus propietarios actuales prefieren el término de "quedarse latente".

Tenemos que adelantarnos mucho en el tiempo, hasta el año 2002, en donde Mr. Marzio Villa, el actual presidente de Cuervo y Sobrinos, relanza la marca para Europa. El éxito es casi inmediato, y de tal magnitud que en la actualidad esta firma, antaño olvidada, está presente en más de 25 países y fabrica sus modelos en la región de Jura, en Suiza.


Alguien podría pensar que esta firma que vemos hoy, fuera del nombre, poco o nada tiene que ver con la legendaria herencia de su pasado, y es cierto, pero también lo es -y lo sabéis muy bien- que es lo más habitual entre fabricantes de relojería adquirir marcas "muertas" y hacerlas resurgir con un toque de glamour en el segmento del lujo, algo que parece enganchar (¡y de qué forma!) a los millonarios que adquieren sus manufacturas.

El último modelo para celebrar sus 135 años de historia (ejem..., aunque durante casi cincuenta de ellos la marca no existiera, en realidad) es una edición limitada del Historiador Tradición, un modelo con dos variantes (fondo dorado y fondo blanco) limitado únicamente a 882 unidades, y cuya inspiración parte de un diseño que encontraron en los archivos de la marca en la Habana. Su calibre es automático, con ventana dataria a las seis, resistencia al agua de 30 metros, y caja de acero de 40 mm. El cristal, de zafiro en el frente y en la trasera, está ligeramente abombado en el frontal. Su precio girará en torno a los 3.800 euros, un precio que no está nada mal, del cual seguramente se quedarían asombrados hasta los propios Cuervo fundadores. Hay que ver lo que la gente llega a pagar por simular tener algo de historia en su muñeca.

| Redacción: GacetaIlustrada.com / GacetaIlustrada.blogspot.com

2 comentarios :

  1. Poco tiene que ver con su origen la actual, pero hay que reconocerles el mérito de superar unos tiempos tan difíciles en Cuba, y haberse hecho un nombre.

    Cuando conocí C&S hace 5 o 6 años, me llamó la atención que visto lo visto, Fidel Castro prefiriera los Rolex.

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  2. Decepcionante lo basto y sobrado de las "etiquetas" con el nombre de la marca, rectangulares. Por ese precio, podrian haberlo trabajado mejor

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