El pasado verano en una de mis salidas en bicicleta tuve un grave accidente. De hecho, tal es así que decidí dejar la bici de lado, y no volver a usarla, hasta el punto que, a pesar de que le había cambiado sus componentes a mis gustos y por otros de calidad (unas bielas y platos Shimano Acera, con plato grande de 44, mi preferido, entre ello), y que me había gastado varios cientos de euros en su actualización, la vendí -con la ayuda de mi hermano, no estaba yo por la labor...- por unos 70 €, si no recuerdo mal.
El caso es que a pesar de llevar andando en bicicleta más de veinte años, cometí un error de los más tontos: atravesé un paso de ferrocarril a nivel con las ruedas en paralelo, en lugar de "cortando las vías", como se debe hacer. Eso, unido a que era muy temprano (en torno a las ocho de la mañana) y que las vías estaban empapadas de la helada nocturna, hizo que en un milisegundo diera con mis huesos en el suelo. Para más desgracia, en el asfalto -que era en pendiente- había unas piedras de gravilla, por lo que me dí de lado contra ellas. Yo no soy alto, pero las ruedas de mi bici sí que lo eran -unas de 28-, así que el golpe fue bastante descomunal. Da igual que te preparen para situaciones como éstas, que te digan cómo o dónde caer, lo cierto es que la caída en una bicicleta (o moto) es tan rápida que apenas tienes tiempo de reaccionar. Yo, desde luego, no lo tuve. Y eso que solía entrenar caídas en mis tiempos de entrenamiento de artes marciales. Pero da lo mismo. El impacto no te lo esperas, y estás en el suelo en menos de lo que tarda un abrir y cerrar de ojos.
El caso es que me destrocé el lado izquierdo de la cara, no me rompí ningún hueso -por fortuna-, pero la caída, con una cicatriz a la altura del ojo que me dejará marca toda la vida, me dejó secuelas que perduran y que creo aún perdurarán bastante tiempo. Entre esas secuelas el impacto me produjo que el nervio golpease la zona ósea, y durante dos meses no pude comer alimento sólido. Por el impacto tuve una conmoción cerebral, y esa noche -y durante todo el día- experimenté un shock que me daba temblores, hacía que me marease, y un sinfín de molestias más que prefiero ni acordarme. También tuve una contusión pulmonar, y durante algo más de quince días me dolía al inspirar, y si trataba de inspirar aire me retorcía de dolor de los pinchazos que sentía en el pulmón izquierdo -del lado de la caída-.
Por fortuna llevaba casco, pero el problema es que no me protegió totalmente la zona lateral (un casco integral de moto sí lo hubiera hecho, claro), y con el impacto el casco, además, se movió -da igual que lo tengas ajustado o no: se mueven, a no ser que te lo grapes en la cabeza-, y no me protegió el lado izquierdo de la cara como debería haberlo hecho. Aún así tengo que reconocer que sí protegió la cabeza, principalmente la sien izquierda, y eso evitó que me partiese la crisma allí mismo. Aún así, para curarme en salud la próxima vez que decida salir en bicicleta trataré de hacerlo con un caso que proteja algo mejor y dé un poco más de confianza, como son los cascos de descenso.
Durante todo este tiempo y mi convalecencia me he planteado seriamente si continuar montando en bici o no. Las bicicletas siempre fueron una parte importante de mí, de mi vida, mi trabajo, de mi entretenimiento y de mi hobby. Toda su mecánica, componentes, estética y filosofía (la autonomía que te da y el superarse a uno mismo) me encanta y coincide plenamente con mi filosofía de vida natural, ecológica, autónoma y autosuficiente. Pero un accidente así le hace a uno replantearse muchas cosas, muchísimas.
Así que estuve sin bici hasta ahora, y de hecho no pensaba volver a subirme en una, aunque cada día la echaba más de menos. Pero vi una oferta tentadora y no pude resistirme a hacerme con ella: se trataba de una Orus FR-100 por poco más de cien euros cuando habitualmente esa bicicleta se vende por 250~270 euros. Lo bueno es que tenía componentes de calidad, de gama baja, pero de calidad, entre ellos cambio completo Shimano, cadena KMC y neumáticos Kenda. Decidí aprovechar la oportunidad y llevarla conmigo.
Orus es una marca bastante desconocida en el mundo de las bicicletas. La razón es que solamente fabrica MTB, no produce bicis de ninguna otra variante, ni de carretera, ni de trekking ni de paseo. De hecho, ni siquiera produce bicicletas MTB para mujer: sólo fabrican MTBs de hombre. Además, tiene una línea muy limitada -pero, repito, muy buena- con solo dos tipos de cuadros y tres variantes cada uno, que se diferencian entre sí solamente por el conjunto que montan. Esto es enormemente bueno, porque aunque compres el modelo más básico -como fue mi caso, no había para más...- resulta que da igual, porque tendrás el mismo cuadro que el modelo superior. Dicho de otra forma: cuando quieras -o puedas- podrás actualizarla y tener una bicicleta muy elitista. Como prueba sólo un detalle: el cuadro de mi FR-100 posee en los tirantes traseros pre-instalación de frenos de disco, por si algún día el dueño quiere ponérselos, y eso es debido a lo que acabo de contar, que es el mismo cuadro, idéntico, al que tienen el modelo superior FR-200, o el "top" con conjunto Deore, la FR-300.
Otra de las razones de la que la mayoría rehuya de las Orus es que en España esa marca la distribuye Carrefour. Lo que para muchos es sinónimo de calidad pésima, acabados desastrosos y equipación mínima. Pues no. La gente también supone que Orus es una marca de China, incluso le pregunté al vendedor y me dijo que no lo sabía seguro, pero que "creía" que las fabricaba Orbea. A mí me sorprendió, porque según tengo entendido Orbea no produce bicicletas para otras marcas. La realidad es que Orus es una marca italiana, y la fabrican en Italia, nada de China. De hecho es muy superior a muchas otras marcas de renombre que ponen el logo de, digamos, Cannondale o Trek, y luego son producidas en factorías chinas, sobre todo las variantes más bajas. Más aún: Orus fabrica bajo licencia bicicletas de la prestigiosa firma Raleight, ahí es nada. Por lo tanto no estamos hablando de una marca que produzca bicis como quien hace garabatos en un papel. Orus se dedica exclusivamente desde su sede en Dronero (Italia) a la fabricación de bicicletas.
Con esto no estoy diciendo que todas las bicicletas que nos compremos en Carrefour, Decathlon, Decimas o grandes almacenes similares no sean malas, y eso no quita tampoco que muchas de ellas mejor huir. Por ejemplo, en Decimas sus bicicletas son desastrosas, y en Decathlon, que tienen muy buena fama con sus Rockrider, por precio tampoco es que sean para tirar cohetes. De hecho podrían considerarse a un nivel parecido a las B-Pro (que es el nombre de las bicicletas de marca blanca de El Corte Inglés, también producidas por fabricantes asiáticos).
Para poner en perspectiva la calidad de Orus lo mejor es compararla con una bicicleta similar de un fabricante de reconocido prestigio, como BH. Pues bien, yo fui dueño de la Beartrack más básica, que también rondaba los 300 €. Cuando adquirí la Beartrack tuve que cambiarle prácticamente todo, excepto el eje pedalier, porque era un desastres en todo su equipamiento. Su cuadro dejaba muchísimo que desear, así como su equipamiento de serie. La potencia, llantas, neumáticos y cadena eran de una calidad pésima, indignas incluso para una bici del todo a cien, y sin embargo las montaban en toda una BH. Eso para que todo el mundo sepa que la mayoría de las veces pagamos por la marca, y no pagamos por la calidad del producto.
El diseño del cuadro es otro de los buenísimos detalles en las Orus. Todo el cableado se enruta a través del tubo superior, y el desviador es de tiro por arriba ("top swing, top-pull"). Estaba cansado que en mis BH (y otras marcas que tuve) uno o dos de los cables pasaran por el tubo diagonal, porque a la hora de reparar algo o de limpiarlos era muy engorroso y si salías acababan sucios completamente. Además, bajo la caja pedalier se amontonaba barro y suciedad y tenías que estar limpiándolo cada pocos días con mucho cuidado.
El acabado, presencia y terminación de la Orus es, simplemente, espectacular. La verdad es que por el precio que me costó estoy más que contento con ella, es una bicicleta de un nivel superior, y de hecho se vende rozando los 300 €, y es por algo. Y como he dicho no estoy hablando desde el desconocimiento ni soy alguien que acaba de aterrizar en el mundo del MTB, sino que llevo ya muchos años en esto.
Obviamente no todo lo que reluce es oro. Por ejemplo, las bielas y platos de la FR-100 dejan bastante que desear, siendo de acero, pero no pasa nada porque por 20 € puedes comprar unos Shimano de una calidad digna, además, al llevar el resto de conjunto Shimano le sentarán como un guante. El sillín tampoco me ha gustado, aunque también es de marca, y no un sillín "encontrado en un mercadillo" como el que te traen muchas BH. Por supuesto, los pedales ni mencionarlos, son de plástico barato que no me he molestado ni en ponérselos, ya que le pondré mis Wellgo de aluminio que suelo utilizar (y que por fortuna tenía guardados desde el accidente). Pero no pasa nada, son detalles sin importancia y, además, en esa franja de precios todas las bicicletas llevan pedales de basura, no se le puede pedir peras al olmo.
Lo que sí me ha dejado un mal sabor de boca es el servicio de Carrefour. Cuando ví la bicicleta en la tienda la tenían con el manual, pero a casa me llegó sin él. Me imagino que por el camino alguien se habrá entretenido curioseándolo y se lo habrá llevado a su casa. Otro tanto de lo mismo con los tornillos del portabidón (que, por cierto, en Orus montan dos, lo cual siempre es de agradecer porque para una urgencia te puede venir más que bien), que me llegó sin ellos. Les he escrito a Carrefour a ver si me dan alguna solución, lo mínimo es que me envíen lo que falta. Me parece un desastre que vendan un artículo sin piezas, pero no me sorprende porque sé que es lo que suele pasar con estos grandes almacenes. Por fortuna el resto de la bicicleta está bien, el cuadro perfecto, y las soldaduras robustas y muy bien acabadas.
Lo que quiero dejar bien claro y aconsejar es que, si alguien quiere comprar un modelo de esta marca y tiene dudas por no ser muy conocida, que sepa que Orus aventaja en bastante a marcas de más renombre, que son más conocidas por tener catálogos muy variados y por invertir mucho en publicidad. Orus no invierte en publicidad, pocas veces la oirás y seguramente que tampoco la verás mucho en tus salidas en bicicleta, pero no quiere eso decir que sea mala. Más bien al contrario. Me siento muy contento de haberla elegido por encima de Orbea, Conor y, por supuesto, por encima de BH. Creo que no solo es una gran máquina, con muy buen equipamiento, sino que además tiene un precio muy equilibrado, con componentes que puede que sean baratos, pero de calidad, no como otros fabricantes que montan cualquier componente de a saber dónde lo sacan. De hecho para encontrar bicicletas con los Shimano básicos tienes que irte a precios en torno a los 280 €, que es lo que cuesta la Trek 820, y eso que el cuadro de la Trek es de acero (de cromoly, pero acero), mientras que todas las Orus llevan cuadro de aluminio. Además, la talla 18 que tienen (solo juegan con dos tallas, por cierto, la 18 y la 20) me queda genial con la forma del cuadro. En suma, me alegra haber aprovechado la ocasión. Ahora a ver si Carrefour está a la altura y me envía esos pequeños detalles que me gustaría tener. Porque es una lástima que Orus no se venda en más sitios, y en España solamente tengas que ir a Carrefour si quieres esa marca. Pero bueno, al menos en Carrefour puedes encontrarla.
| Redacción: Radio Ibérica
Una bici muy chula.
ResponderEliminarMe alegra que hayas retomado la afición!
Antes de que venga un accidente o una desgracia personal o cercana el Destino o llamémoslo como queramos “El Ángel de la guarda” siempre nos avisa antes, el problema es que hoy en día la gente no escucha su interior ni se fija en las señales de aviso, estamos dormidos.
ResponderEliminarCuando ves que se acercan nubes negras y las Golondrinas empiezan a surcar los cielos es señal de que se acerca tormenta, cuando ves que las aguas del mar se retiran es que viene un Tsunami, cuando hay calma y silencio repentino en el entorno es señal de un Terremoto……
Nadie sabe mejor que uno mismo lo que debe hacer, si te apetece volver a la bici adelante, pero escucha siempre en tú interior, yo siempre he sido de la opinión de que no hay que tentar a la suerte varias veces, pero podría haber sido un accidente fortuito fruto del cansancio o de un despiste, de todos modos me alegro mucho de que ya estés mejor y retomes tú afición por las bicis, pero ten cuidado.
Con respecto al tema de los modelos de bicicletas solo tengo que decir que no tengo ni idea, yo con una barata tendría de sobra, pero es que en este terreno soy poco exigente.
Gracias Guti!
EliminarApolino... me estás dando miedo :D No creas, que he pensado muchas veces en eso, pero si cualquier cosa que nos pase tomamos ese camino llegará un momento en que no saldremos de casa ni podremos hacer nada. No es la primera vez que tengo un accidente en bici, aunque sí es verdad que éste es el mas serio, pero más que por la bici creo que si hay mala suerte es por el año, que ha sido negrísimo en lo personal, y eso solo remató la faena. Así que si crees en las fatalidades, en las premoniciones o eres suspersticioso yo creo que deberías verlo en global, y no enfocarlo en una cosa en particular.
En la vida siempre te encontrarás con tesituras de este tipo, y ¿qué haces? ¿Sigues adelante o no? ¿Te detienes esperando que te venga el infortunio por otro lado?
Hola Nelbu, no pretendo ser fatalista, se que no se puede vivir con el miedo, pero cuando uno tiene una temporada fatídica y yo creo que todos alguna vez hemos pasada épocas malas en la vida es mejor esperar un poco ¿Quizás un añito…? a que pase la tormenta y que las nubes dejen ver el Sol, hay que ir poco a poco.
EliminarPor quitar un poco de hierro al asunto, cuando estaba leyendo tú Post me acordaba de los toreros, que cada vez que les coge el Toro están deseando volver otra vez al ruedo sin estar totalmente recuperados, me ha venido eso a la mente al leer tú insistencia con la bici, me he dicho internamente ¡Mira, parece un Torero!
No te lo tomes a mal Nelbu, solo intento hacerte ver que es muy precipitado a pocos meses de la caída desastrosa que podría haber sido mucho peor empezar otra vez con la bici como si nada, al menos ves poco a poco, es solo una opinión personal, es lo que yo haría, bueno, yo esperaríaaaa….. mucho tiempo antes de volver a coger la Bici.
Muchas gracias Apolino, admiro tus palabras y te las agradezco enormemente porque sé que están dichas desde el corazón y se nota al leerte que las dices con mucho sentimiento y desde la sinceridad. Y la verdad es que tengo que darte la razón porque sí que la tienes, y no es bueno tentar a la suerte (sobre todo cuando uno ve que ya le va quedando poquita, jajaja!). El hecho de conseguir la bici ahora fue por aprovechar una oportunidad que sé, según está el mercado, que no se suele dar, y es el conseguir una bici con esos componentes a ese precio. Pero de momento no saldré con ella, tengo que cambiarle algunos detalles (platos, como he comentado), y está el tema del casco, que los modelos con mentonera rondan los 150 € y es un pastón -al menos para mí :D -; a eso hay que unir que estas son malas fechas para comprar esas cosas, así que iré despacio. Una vez conseguida la bici lo demás me lo tomaré con calma. Así que este año se acabará seguramente sin que salga con ella, y a ver si así se acaba la racha.
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EliminarMe alegro Nelbu que te haya servido a modo de reflexión mí punto de vista sobre el asunto de la Bici, con respecto a la Bici que te has comprado me parece una buena compra, seguro que le iras sacando buen partido.
No sabía nada de tu accidente y me alegro mucho de que te hayas repuesto y lo hayas superado.
ResponderEliminarLa bicicleta es una maravilla. Enhorabuena, Nelbu.